La sangre de mosca pegada a mi cuaderno. A mis ideas, a todo lo que he podido hacer en los últimos meses. Todo esta ahí, debajo de la sangre.
Es un cuaderno que quiere volar, se quiere romper en pedazos y escapar de si mismo, olvidar quien es, de donde viene, y ser eso. Solamente viento.
Como esa nube. Como esos pájaros que planean lentamente a algún lugar.